¿Cómo comunicarnos hábilmente con nuestra pareja?
Si a nivel personal con frecuencia tenemos problemas que pueden parecernos irresolubles o como mínimo de solución complicada, cuando se trata de resolver un problema entre dos, el objetivo resulta mucho más complejo. Tanto que muchas parejas llegan a arrastrar durante años cuestiones de aparentemente fácil solución.
Una de las definiciones de la solución de problemas radica en la interacción estructurada entre dos personas, diseñada para resolver una disputa particular entre ellas.
La disputa generalmente gira en torno a una queja y petición de cambio de una persona en relación a la conducta del otro.
Presento las principales herramientas de comunicación de pareja, útiles para la solución de problemas en la pareja:
1. Comenzar siempre con algo positivo
Este modo de introducir un problema facilita la cooperación y receptividad del otro.
Si mi objetivo es conseguir que mi compañero se quede alguna tarde cuidando los niños, podré ser más efectivo si le digo “ya sé que has estado trabajando mucho esta semana, no creas que no me he dado cuenta… lo único que lamento es que no me ayudes a cuidar los niños algún día a la semana”.
2. Ser específico
El problema debe ser descrito de tal modo que pueda ser determinado con claridad por el observador. Igualmente, la utilización de términos provocativos y categoriales dicotómicos, como “eres un desconsiderado”, “siempre”, “nunca” nos alejan de los objetivos de la cooperación.
3. Expresar tus sentimientos
Una buena comunicación para resolver problemas significa compartir tus sentimientos así como admitir abiertamente la conducta que nos motiva.
4. Admitir tu papel en el problema, es decir aceptar la responsabilidad que uno tiene en el conflicto existente.
5. Ser breve cuando defines problemas
A menudo la pareja confunde hablar sobre el problema con resolver el problema.
Para ello, pueden ser útiles las siguientes pautas:
a) Discutir únicamente un problema a la vez. Si difícil resulta discutir con eficacia un problema, más aún lo será si son varios los presentes en la escena del debate y negociación
b) No hacer inferencias. Hablar únicamente sobre lo que puede observarse.
El siguiente diálogo puede mostrar lo inadecuado de utilizar inferencias
Marido: ¡No me agrada que me humilles!
Mujer: ¡Pero si yo no intento humillarte! Sólo he hecho un comentario y me he sonreído porque me hacía gracia.
Marido: eso es lo que dices ahora, pero te he visto que querías humillarme.
Mujer: ¡Mira, estoy harta de que siempre andes interpretándome lo que yo quiero o deseo hacer!
Hablar únicamente de lo que puede observarse es una regla básica para lograr una comunicación efectiva.
6. Centrarse en las soluciones
7. El cambio deberá incluir reciprocidad y compromiso
8. La cooperación y el compromiso de cada uno está en función del nivel de ayuda y compromiso del otro.
9. Alcance del acuerdo. Una vez se han planteado una serie de soluciones, se pasa a discutir las ventajas y desventajas de la solución propuesta, incluyendo las consecuencias de cada una para la relación y para ambos componentes de la pareja.
Son muchas las investigaciones que evidencian que el conflicto de una pareja (“llevarse mal”, “no entenderse”, “haber perdido el amor”) suele deberse a un déficit de ciertas habilidades para relacionarse el uno con el otro, y no a problemas individuales imposibles de cambiar (“somos así”).
En Centre Giner creemos que las habilidades sociales son fruto de un aprendizaje social a lo largo de nuestra vida. De este modo, en nuestro servicio de Psicología Clínica situado en Barcelona y Sabadell trabajamos con el fin de modificar y, así mejorar, las habilidades conversacionales dentro de la pareja.
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